Las Nabatas es uno de los acontecimientos más importantes de la primavera en estas montañas. Esta fiesta rememora una antigua tradición, el transporte fluvial de la madera desde los ríos del Pirineo hasta la desembocadura del Ebro. Aprovechando el deshielo, los nabateros guiaban estas balsas por las guas bravas de los ríos, construidas con troncos que unidos en plataformas.
Actualmente, cada tercer domingo de mayo, varias nabatas descienden el río Cinca desde Laspuña hasta a Aínsa en honor a los antiguos nabateros.
En el año 2013, las Nabatas fueron declaradas Bien de Interés Cultural Inmaterial por el Gobierno de Aragón.
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